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Estela Raval tiene todos los atributos que permiten la vigencia de una estrella indiscutida. Seriedad, sensibilidad, jerarquía interpretativa y emoción, son los condimentos que la convirtieron en una cantante fundamental de nuestra música, que supo grabar a fuego su voz, en melodías eternas e inolvidables. Tras sus primeros pasos como solista, debutó en 1957 con "Los Cinco Latinos", y desde el primer simple editado, con los temas “Amor joven” y “Abran las ventanas” se convirtieron en un rotundo suceso artístico y comercial. Las canciones de “Los Cinco Latinos” se difundían fulminantemente por toda América y Europa. Al año de su primer éxito, habían superado un millón de placas vendidas. Las exitosas giras los llevan a los más diversos escenarios del mundo. Uno de los recuerdos memorables del grupo fue la presentación junto al quinteto norteamericano “The Platters”, en la Plaza de Toros de Valencia (España), en lo que fue la única actuación de los dos grupos vocales más importantes del mundo. En 1969, y en el mejor momento de su elevada carrera, “Los Cinco Latinos” deciden disolver la formación, poniéndole fin de esta manera a un conjunto cuya calidad y fama sin fronteras alcanzó los rincones de todo el mundo. En todos esos años Estela Raval había brillado en cada una de las presentaciones, con su envidiable elegancia, su carisma y su voz inconfundible. Se había convertido en la diva absoluta de los años 60's, y había capitalizado una gran experiencia y madurez vocal e interpretativa. Como solista graba su primer simple con los temas “No me vuelvo a enamorar” y “No me cambies la cruz”, compuesto por Sandro especialmente para ella. A partir de ahí comienza a transitar el mismo camino de éxitos que con “Los Cinco Latinos”. Giras, discos, fama mundial. Estela lucía como nunca sus cualidades vocales. A principios de 1982, y con motivo del Mundial de Futbol a llevarse a cabo en España, Estela recibe la propuesta de reunir a “Los Cinco Latinos”. Comienza una nueva etapa, esta vez como “Estela Raval y Los Cinco Latinos”, pero con la misma repercusión que en las décadas del '50 y '60. Más tarde sigue su carrera como solista con los mismos resultados. Siempre en el sendero del éxito, Estela Raval es una artista indiscutida, de soberbia calidad interpretativa y absoluta vigencia.
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